La Declaración de los derechos de los campesinos ha sido adoptada en el Consejo de Derechos Humanos. Una votación histórica apoyada mundialmente

Solo algunos países de Europa se unen a la comunidad internacional para defender los derechos de los campesinos. Este texto será presentado en la Asamblea General de las Naciones Unidas en los próximos meses

02 10 2018

Ginebra , 28 de septiembre de 2018 -  Con 33 votos a favor, 3 votos en contra y 11 abstenciones, la «Declaración de los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales» ha sido aprobada esta mañana por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU y será presentada, en otoño de 2018, ante la Asamblea General de la ONU, en Nueva York.

Esta votación es un éxito enorme para todas las organizaciones de campesinos, ganaderos, pescadores artesanales, pueblos indígenas y trabajadores rurales quienes, junto con la Vía Campesina, han defendido esta declaración en sus países y en el Consejo de Derechos Humanos.

Tres países de nuestra región han destacado por su compromiso con la defensa de los derechos de las comunidades rurales vulnerables y han votado a favor del texto: Suiza – partidaria de la declaración desde hace mucho tiempo; Ucrania – muy comprometida en su primera vez como miembro del Consejo de Derechos Humanos; y Portugal – que ha hecho grandes esfuerzos para moderar la posición de los países europeos y que copatrocinó la declaración. ECVC quiere expresar su gratitud a estos países europeos que han defendido la dignidad de los campesinos y de las comunidades rurales.

A pesar de esta victoria, la Coordinadora Europea Vía Campesina (ECVC) deplora la falta de compromiso de los países de la Unión Europea en favor de la declaración. «Alemania y la Unión Europea expresan, a menudo, su apoyo a los derechos humanos, al desarrollo del sur y a la agricultura familiar. Sin embargo, en este momento crucial, se oponen a la declaración y se aíslan de la comunidad internacional. Esto es incomprensible e inaceptable», declara  Paula Gioia, miembro de la Asociación alemana de economía rural (AbL) y de ECVC.

«Estoy muy decepcionado -reconoce José Manuel Benítez, agricultor español-. Nosotros esperábamos que España siguiera a Portugal, Ucrania y Suiza. Esperábamos un voto a favor, por los miles de campesinos que luchan por unos ingresos dignos y por el reconocimiento en nuestro país».

Esto contrasta con el apoyo a favor de la declaración que expresaron las principales instituciones de la UE. En julio, el Parlamento Europeo, adoptó una resolución «pidiendo a los Estados miembros de la UE que apoyasen la Declaración de los derechos de los campesinos y otras personas que trabajan en las zonas rurales y que votasen a favor en todos los niveles del proceso de toma de decisiones de la ONU».

El Relator Especial de la ONU para el Derecho a la Alimentación, Hilal Elver, instó a todos los Estados miembros de la ONU a votar a favor de la Declaración. En su carta oficial, la representante de la ONU dijo que "la inminente adopción de la Declaración será una señal significativa de progreso, una prueba de la seria y urgente preocupación de la comunidad internacional por construir soluciones para eliminar el hambre y la malnutrición, así como la pobreza y promover la sostenibilidad en la agricultura y la producción de alimentos".

Una petición reunió más de 72.000 firmas en pocas semanas y, a medida que se acercaba la votación, los apoyos se iban manifestando. Asimismo, una petición lanzada por ciudadanos británicos obtuvo el apoyo de más de 5.000 personas en tan solo 24 horas.

ECVC constata con desilusión que los intereses que defiende Europa no están en armonía con las aspiraciones y  necesidades de sus ciudadanos, quienes desean una alimentación proveniente de pequeñas explotaciones ¡y piden que se afirmen y protejan los derechos de los productores!

Pedimos a todos los países europeos que reconsideren su posición en vista de la aprobación final de la declaración en la Asamblea General de las Naciones Unidas en los próximos meses y sigan el ejemplo de Portugal, Ucrania y Suiza.